Desde el principio de los tiempos, la religión ha formado nuestras creencias, morales, virtudes y acciones. Solía ser que no existía ni una sola duda de que había un ser supremo. A través de los años, cuando la gente comenzó a pensar más profundamente y a aferrarse a la ciencia, razón y filosofía, la gente del mundo también comenzó a negar la existencia de un creador del mundo. Ahora, existe la idea de que todo ocurrió al azar. Aún algunos de los que creen en Dios o la Biblia solamente escogen las partes de la <<religión>> que corresponden con su manera de vivir. Últimamente, vivimos como queremos.
Nuestra nación fue fundada en principios cristianos. Los primeros colonos en esta tierra vinieron para escapar la persecución religiosa. El problema de hoy en día viene cuando intentamos deshacernos de la idea de Dios completamente. ¿Por qué tenemos morales? ¿De dónde vienen? Podemos separar la Iglesia y la política, deshacerse de la oración en las escuelas o quitar Dios de nuestra jura de la bandera, pero, de esta manera, estaríamos separando a Dios completamente de nuestras decisiones como un país; un país fundado en Él. Bueno, digamos que existe Dios y la Biblia es verdadera. ¿Deberíamos separar lo que dice la Biblia de las decisiones que hacemos como un país?
Personalmente, creo que la Iglesia ha cometido muchos errores y se ha convertido en un grupo que muchos consideran hipócrita. Muchas de las veces esto es verdad. Aún así, no podemos echar la culpa a Dios por las acciones de seres humanos. Para mí, la unión de Dios con cada decisión que hacemos es esencial. Pero aunque sé que muchos no estarán de acuerdo, especialmente hoy en día, esa es mi opinión.
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